Las estrellas aparecen
cuando llegas,
entras sin avisar
y cuando yo te siento
el frío mundo se agita,
las sombras nos cubren,
amparando nuestra metamorfosis.
El clamor del cuerpo se despereza
asoman deseos escondidos,
que se abren sin pudor,
y el espíritu de la oscuridad,
ese inmenso circulo sin relevo
deja de existir.
Y somos al fin
nosotros,
el silencio, el clamor
de dos almas
MaRía
MaRía